– desde 1893 –
Historia
La historia de Birba se remonta al siglo XIX y nos sitúa en Camprodon.
Camprodon (Camprodón) se encuentra en el corazón del Pirineo Oriental, en la provincia de Girona. Construido sobre tradiciones centenarias y rodeado de naturaleza, ofrece contrastes increíbles en cualquier época del año.
En esta localidad, la familia Birba regentaba un pequeño negocio de ultramarinos. En aquella época, Camprodon, por su clima y entorno natural, ya empezaba a ser uno de los destinos veraniegos preferidos por los barceloneses. Esto hizo prosperar el negocio, especialmente los bizcochos finos y los productos de confitería, que se habían empezado a elaborar para el público estival y que pronto alcanzaron gran fama por su calidad y sabor.
Sin embargo, durante los meses de invierno, cuando faltaban los veraneantes, las ventas eran muy escasas. Esto hizo que, en 1893, la familia Birba empezara a elaborar galletas, que por no ser tan perecederas como los pasteles, se podían distribuir sin problemas.
La demanda crecía cada vez más y las galletas empezaron a destacar como lo que finalmente acabarían siendo: el principal producto del negocio.
Más tarde, uno de los hijos de la familia, Llorenç Birba Cordomí, aprendió el oficio de maestro pastelero y alcanzó gran renombre. Las galletas se elaboraban de manera muy artesanal, en un pequeño obrador situado en el sótano de la casa. También se disponía de un almacén y de una sala de encajado.
La originalidad de las recetas y la gran calidad de las materias primas hicieron que las galletas alcanzaran un gran prestigio y que la demanda aumentara en toda Cataluña. La marca Birba comenzó a ser sinónimo de calidad, sabor y naturalidad, y famosa por elaborar productos muy naturales, con procedimientos artesanales y con los mejores ingredientes de la zona.
En el año 1929, dado que el obrador se había quedado pequeño, se construyó la primera fábrica Birba en el centro de Camprodon, en la avenida Maristany. Ese mismo año, la empresa recibió el Gran Premio de la Exposición Internacional de Barcelona.
Durante la guerra civil, el edificio de la fábrica se vio afectado en varias ocasiones por el conflicto y tuvo que ser reconstruido. Fueron momentos muy difíciles, en los que cabe destacar que, dada la escasez de materias primas, se llegó incluso a sembrar trigo y remolacha para obtener azúcar y harina que permitiera continuar elaborando las galletas.
En 1961, Llorenç Birba Cordomí fue condecorado con la Medalla de Bronce al Mérito en el Trabajo por su esfuerzo y dedicación.
Desde entonces, la empresa ha pasado por diferentes etapas hasta llegar a los propietarios actuales, pero siempre ha sido fiel al legado de la familia, respetando los procesos de elaboración artesanal y cuidando al máximo la selección y calidad de los ingredientes de sus productos.
La fábrica actual se construyó en el año 2008 junto a Camprodon y cuenta con más de 7.000 m2. Todavía se conservan los hornos de la fábrica originaria, que funcionan perfectamente.
Hoy en día, la gama de productos Birba se compone de diferentes variedades, la mayoría de los cuales ya se fabricaban en los inicios de la empresa, en 1893.
Cronología
Finales del s.XIX
En Camprodon, en el corazón del Pirineo Oriental (Girona), la familia Birba abre una tienda que vendía todo tipo de producto. Más tarde ampliarían el negocio con una Confitería para ofrecer “cocas y tortas de hojaldre” a los numerosos veraneantes.
1893
Se empiezan a elaborar galletas en un obrador artesanal en el sótano de la casa de familia. Disponían de un horno de escopeta y alguna máquina, también de una sala de encajado y un pequeño almacén. Pronto empezarían a envasar las galletas en cajas.
1929
Se inaugura la primera fábrica Birba en la Avenida Maristany de Camprodon. Este año se le concede a la marca “El gran premio de la Exposición Internacional de Barcelona”.
Postguerra
Durante la guerra civil, la fábrica tiene que ser reconstruida. Esta época fue muy difícil por la escasez de materias primas. El gran esfuerzo en la reconstrucción llevó a Llorenç Birba Cordomí a ser condecorado con la medalla “al merito en el trabajo” por su dedicación y espíritu emprendedor.
1987
Galetes Camprodon S.A. cambia de manos y deja de pertenecer a la familia Birba. Se realiza entonces una inversión muy fuerte en maquinaria para adaptarse a las nuevas necesidades del mercado.
Años 90
Fuerte expansión comercial para abordar la distribución moderna. Se amplia la variedad de galletas con el lanzamiento de Nuria Integral, Nuria Mini Xoco y Mini Surtido Birba.
2008
Inauguración y puesta en marcha de la nueva fábrica en Camprodon con más de 7000 m2 y capacidad de triplicar la producción anterior. Todavía se conservan máquinas y hornos de la primera fábrica.
2009-2010
Se amplía aún más la gama disponible, con el lanzamiento de Nuria Mediterránea y Nuria Sin Gluten para el público celiaco. Además se lanza Mos, dentro de la gama de Especialidades.
2013
La propiedad pasa a manos de un grupo de inversores catalanes que asume también la gestión de la firma.
2014-2015
Se sigue apostando por el crecimiento, con el lanzamiento de dos nuevas variedades: Tast, dentro de la gama de Especialidades, y Nuria 0% Azúcares, dentro de la gama Nuria.